lunes, 30 de septiembre de 2013

FRANCISCO: "Seguir a Jesús no es neutro, significa comprometerse, no es algo decorativo, es la fuerza del alma".

Domingo, 25 de agosto de 2013 (*)
      Jesús le dice a los discípulos: 
     ¿Piensan que yo he venido a traer paz en la tierra? No, en cambio yo les digo, división¿Qué significa esto? Significa que la fe no es una cosa decorativa, ornamental. No es decorar la vida con un poco de religión, como si fuera una torta que la decoramos con crema chantilly. ¡No!, la fe comporta elegir a Dios como criterio base de la vida, y ¡Dios no es el vacío, ni es neutro. Dios es siempre positivo, Dios es amor positivo!.
Después que Jesús vino al mundo no se puede hacer como si a Dios no le conociéramos. Dios tiene un rostro y un nombre: Dios es misericordia, es fidelidad, es vida que se dona a todos nosotros. Por esto cuando Jesús dice: he venido a traer división, no es que Jesús quiera dividir a los hombres entre ellos. Al contrario: ¡Jesús es nuestra paz, es nuestra reconciliación! Pero esta paz no es la paz de los sepulcros, no es neutralidad, Jesús no trae la neutralidad. Esta paz no es un compromiso a cualquier costo. Seguir a Jesús comporta renunciar al mal, al egoísmo y es elegir el bien, la verdad, la justicia, mismo cuando pide sacrificio y renuncia a los propios intereses. Este sí, divide, lo sabemos, divide también las relaciones más estrechas. Pero atención: ¡no es Jesús el que divide! Él pone el criterio: o vivir para sí mismos, o vivir para Dios y para los otros; hacerse servir o servir; obedecer al propio yo u obedecer a Dios. En este sentido es “signo de contradicción”.
Por lo tanto esta palabra del evangelio no autoriza de hecho el uso de la fuerza para difundir la fe. Es justamente lo contrario: la verdadera fuerza del cristiano es la fuerza de la verdad y del amor, que comporta renunciar a la violencia. ¡Fe y violencia son incompatibles. Fe y violencia son incompatibles! En cambio la fe y el amor van juntos. El cristiano no es violento, es fuerte, y con qué fortaleza: ¡con la fortaleza de la mansedumbre y del amor!
“Acuérdense de esto: seguir a Jesús no es neutro, seguir a Jesús significa comprometerse, no es algo decorativo, es la fuerza del alma.
El Santo Padre concluyó: 
“Y les deseo a todos que tengan un buen domingo y un buen almuerzo. Arrivederci”.

(*) Extracto textual, de Homilías y reflexiones del Papa Francisco, durante la 4°semana de agosto. Síntesis propia, para su difusión en Misas -luego de la Comunión-, Parroquias, Escuelas e Instituciones diversas. Fuentes: NEWS.VA, ZENIT.ORG.

No hay comentarios:

Como María queremos aprender a “estar”!!!

Palabras del Papa Francisco, al final del Vía Crucis, en la Jornada Mundial de la Juventud. PANAMÁ . 26/1/2019 Señor, Padre de miser...